Cómo beneficia cada té a nuestra salud

fuentes: https://www.aromasdete.com

 

 

Cuando a una persona su médico le dice que debería dejar de beber café, una solución es pasarse al té.

Pero ¿a qué tipo de té?. Porque si el té verde y el té negro es de sobras conocido y resulta fácil encontrarlo en los estantes de los supermercados, resulta que también hay té blanco, té rojo, té amarillo y té azul. Y por si no fuera poco con este arco iris, luego también cada color tiene sus variedades

Entonces si uno empieza a beber té por motivos de salud, debería conocer el tipo de té que más le conviene. Así que en este artículo voy a dar un repaso de los tipos de té y sus propiedades para la salud.

Primero quiero aclarar que todos los tés vienen de la planta Camelia Sinensis. Pero ocurre que algunas veces la palabra té se usa del mismo modo que la palabra infusión. En este artículo sólo hablare del té propiamente dicho, es decir del que procede de la planta Camelia Sinensis

Los diferentes tipos de tés reciben tratamientos diferentes una vez recolectados. Estos tratamientos van desde la simple deshidratación, a la oxidación y a la fermentación. Estos procesos cambian la composición química del té y pueden aportar propiedades distintas. 

 

Té verde

El té verde son las hojas de la Camelia sinensis deshidratadas. Al igual que cualquier otra planta medicinal. Es de los que más antioxidantes tiene y el que menos teína tiene. Y por eso conserva un sabor a “hierba” más acentuado.  Como lo que se busca es la riqueza en antioxidantes, puede que sean estabilizadas mediante vapor de agua a presión, evitando así lo máximo posible cualquier oxidación enzimática. 

Sus propiedades antioxidantes evitan el envejecimiento prematuro de todos los tejidos del cuerpo, por eso actúan sobre el nivel de colesterol en sangre, los lípidos del hígado y también en la prevención del cáncer

Si lo  que se busca son las propiedades antioxidantes, éste es el té adecuado

 

Té blanco

Se elabora a partir de la hoja y brotes jóvenes, las yemas, ligeramente marchitadas, desecados al sol y procesados para evitar la oxidación. El nombre de té blanco le viene del color de estas yemas en el momento de la recolección.

Las yemas concentran una gran cantidad de polifenoles, así que el té blanco es el té más antioxidante de todos. Más antioxidantes que el té verde. 

Si lo que se busca son las propiedades antioxidantes este también sería el té adecuado.

 

 

Té amarillo o Huángchá

El té amarillo  consiste en las hojas fermentadas ligeramente mediante un proceso llamado “amarilleo sellado”. El corto proceso de fermentación se frena con calor seco. Este proceso da lugar a la aparición de las teaflavinas y también al color amarillo tanto en las hojas como en la infusión

Si lo que se busca son las propiedades antioxidantes con un poco de teína, y con un sabor entre afrutado y floral, que no es nada amargo, éste sería el té adecuado. 

 

Té azul u oolong 

El té azul es un té ligeramente oxidado. Este proceso le da un color algo azul a las hojas, un color a medio camino entre el color verde sin oxidar del té verde y el color negro tan oxidado del té negro

Conserva gran cantidad de antioxidantes y además también tiene teína, y algo de taninos. Así que este té aporta propiedades digestivas algo astringentes

Si lo que se busca es un té intermedio entre el verde y el negro, con un gusto afrutado, éste es el té adecuado

Pero ojo, si tienes anemia o cualquier trastorno digestivo, ni los taninos ni la teína te benefician, entonces tu té seria el verde o el blanco.

 

te negro

 

 

Té negro

El té negro es un té muy oxidado. Las hojas se dejan fermentar en habitaciones ventiladas y durante este proceso actúan las oxidasas. Es el que más teína y taninos tiene. Esto le aporta propiedades diuréticas y a la vez astringentes. Además es un estimulante del sistema nervioso, esto hace que este  té esté más cerca del café y su sustitución  sea más fácil.

Si lo que se busca es un té con un sabor potente, que sea diurético y estimulante, éste es tu té.

Como en el caso del té azul, si tienes anemia o cualquier trastorno digestivo ni los taninos ni la teína te benefician, entonces tu té seria el verde o el blanco.

 

Té rojo o puehr

El té rojo es el resultado de someter al té verde a una fermentación muy prolongada. Tan prolongada como que puede ser de años en algunas variedades. La fermentación se realiza en contenedores donde se introduce para ello la bacteria Streptomyces bacillaris o cinereus. El resultado es un té de color  rojo oscuro con sabor terroso.

Conserva la mayoría de polifenoles del té verde pero además durante este proceso ha adquirido como producto de la fermentación, un gran número de estatinas . Las estatinas controlan el colesterol en sangre. Esto significa que este té es un buen quemagrasas y un relajante de la presión arterial.

También tiene algo de teína y de taninos. Así que actúa sobre el sistema digestivo y tiene un efecto diurético y astringente, ayudando a eliminar líquidos. También inhibe la liberación de histamina, algo muy beneficioso en caso de alergias

Si lo que buscas es regular el colesterol o bajar la presión sanguínea y además propiedades antioxidantes, y antihistamínicas, éste es tu té.

 

 

Cada té aporta algo a las propiedades comunes entre ellos. Cada té se elabora, sirve y toma de una manera propia. Para aprovechar mejor sus propiedades es necesario conocer como prepararlo y cuando tomarlo. Y es que el té es una infusión con mucha carga cultural.